La histórica carrera que une a Argentina y Chile vivirá desde este jueves una nueva edición, con más de 180 autos en pista, estrictos controles de seguridad y la emoción intacta de medio siglo de historia.
En diálogo con Vuelta Rápida por LU14 Radio Provincia, el periodista riograndense Diego Fernando Cadillo Almonacid describió el clima que se vive en Tierra del Fuego en la previa del Gran Premio de la Hermandad Chileno–Argentino, competencia que este año celebra sus 50 ediciones y 51 años de historia. “La actividad arrancó la semana pasada con las revisiones administrativas y técnicas. Se trabajó con mucha exigencia en la seguridad de los autos, pilotos y navegantes, incluso hubo vehículos relojeados por no cumplir con las medidas o por tener indumentaria fuera de homologación”, explicó.
Este año, el Automóvil Club incorporó a especialistas de la Asociación de Pilotos de Turismo y Rally de Tierra del Fuego (A.PI.TU.R.) para reforzar la organización, el cronometraje y la verificación de elementos de seguridad. “Se hizo un trabajo muy minucioso, y habrá controles estrictos desde el clasificatorio del viernes”, adelantó Cadillo, que estimó que serán cerca de 185 los autos que largarán, con más de 60 provenientes de Chile y una importante participación de debutantes y jóvenes pilotos.
La edición también trae historias de leyenda, como la de Constante Moreno Preto, de 74 años, que volverá a correr con el mismo Suzuki Swift con el que ganó en la categoría B y en la general. O la de Luis Marcicio, de 73, que este año competirá junto a su nieta como navegante, en una carrera que sigue transmitiendo la pasión de generación en generación.
Vehículos de Constante Moreno Preto y Luis Marcicio
Sobre el estado de los caminos, Cadillo adelantó que se encuentran secos y rápidos, aunque el pronóstico marca posibles lluvias y nieve para el sector chileno en la primera etapa. “En la isla todo puede cambiar de un momento a otro, y eso le agrega un condimento especial a la carrera”, dijo.
El jueves a las 18 horas se realizará la largada simbólica en la Plaza de los Cien Años de Río Grande, obligatoria para las tripulaciones. El viernes será el clasificatorio, en un tramo rápido y técnico desde la puerta 4 de Flamenco hasta la estancia María Betty. El sábado se correrá la primera etapa Río Grande–Porvenir y el domingo, la segunda etapa Porvenir–Río Grande.
Cadillo, que forma parte de la transmisión oficial por Radio Nacional y FM Fuego, subrayó que la seguridad será prioridad: “La Hermandad la corren los que van adentro del auto. El resto participa de otra manera, pero siempre con cuidado. Va a haber mucho control y, si hay gente en lugares peligrosos, se va a parar la carrera. Tiene que ser una fiesta, sin nada que lamentar”.
