La Subsecretaría de Salud Mental Integral brindó una capacitación a equipos del Poder Legislativo para fortalecer la contención y el acompañamiento ante situaciones de crisis. “Así como se avanzó con la perspectiva de género como una política transversal, creemos que la salud mental también debe ocupar ese lugar”, señaló el subsecretario de Salud Mental Mariano Rodas, en diálogo con Radio Provincia.
En el marco de un trabajo conjunto entre el Ministerio de Salud y la Honorable Cámara de Diputados, se desarrolló una jornada de capacitación sobre salud mental dirigida a jefes y jefas de distintos sectores del cuerpo legislativo. La actividad forma parte de la elaboración de un protocolo institucional para el abordaje integral de la salud mental y el consumo problemático en el ámbito laboral.
El subsecretario de Salud Mental Integral, Mariano Rodas, explicó que el proyecto busca que cada organismo cuente con un equipo capaz de “receptar las problemáticas de salud mental, articular con los servicios correspondientes y acompañar a los trabajadores que lo necesiten”.
“Creemos que ante cualquier legislación es importante una política que acompañe, y para eso necesitamos empatía y comprensión —indicó Rodas—. No se trata solo de cumplir una norma, sino de entender por qué es importante hablar de salud mental y generar espacios donde todos puedan participar”.
Durante la charla se abordaron temas vinculados a primeros auxilios psicológicos, consumo problemático y protocolos de intervención. La propuesta se planteó como un espacio de diálogo y reflexión más que como una capacitación formal. “La participación fue increíble —destacó—. Íbamos a estar una hora y terminamos casi tres, porque surgieron muchas preguntas y se generó un debate muy enriquecedor”.
Rodas subrayó que gran parte de la vida de una persona transcurre en el trabajo, por lo que el entorno laboral influye directamente en la salud mental. “Si uno se siente contenido, escuchado y con posibilidades de crecer, eso repercute positivamente; pero si se siente agredido o desvalorizado, el impacto puede ser muy negativo”, señaló.
El subsecretario remarcó además la necesidad de desmitificar la atención en salud mental. “Todavía hay mucho miedo a pedir ayuda, y eso se relaciona con un modelo antiguo. Hoy la internación es el último recurso, se evita en la medida de lo posible y se controla para que no haya arbitrariedades. Es importante que la gente lo sepa, para que pueda acercarse sin temor”.
La iniciativa pretende extenderse a otros organismos del Estado. “Así como se avanzó en su momento con la perspectiva de género como una política transversal, creemos que la salud mental también debe ocupar ese lugar”, expresó Rodas.
Desde la Subsecretaría de Salud Mental Integral se continuará impulsando espacios de debate, promoción y prevención en distintas instituciones de la provincia. “No alcanza con planificar políticas o escribir protocolos —concluyó Rodas—. La salud mental se construye entre todos, en comunidad, desde el compromiso cotidiano”.
