El delegado gremial de la maderera neuquina que cerró sus puertas y despidió a los trabajadores afirmó que tienen miedo de abandonar el predio y que vacíen el lugar. “Si siguen así esto se va a convertir en un Parque Industrial fantasma” afirmó.
MAM fabrica tableros de madera, bins para líquidos a granel y cajones de frutas y hortalizas. Mientras los responsables de la misma afirman que el aumento de la tarifa de la luz y las importaciones complicaron su rentabilidad, los trabajadores advierten por intentos de vaciamiento.
El pasado lunes 3 de julio, los trabajadores de la maderera MAM que pretendían ingresar a la fábrica se encontraron con que el portón estaba cerrado. Los gerentes de la empresa desde el orto lado de la reja les anunciaron que algunos de ellos estaban despedidos y otros suspendidos.
LU14 conversó con Franco Vergara, delegado de los trabajadores de MAM, quien contó cómo fue ese momento en el cual encontraron a las 6 de la mañana que los portones estaban cerrados y ya no tenían trabajo.
“Somos un total de 94 trabajadores y al situación es que llegamos el lunes a las 6 de la mañana y nos encontramos con el portón cerrado y el dueño de la empresa del otro lado nos dice que la mitad están despedidos y la otra mitad suspendida. Le explicamos que no nos íbamos a retirar porque no teníamos notificaciones formales de esto y nos dice que se nos envió el telegrama a los domicilios y que fuésemos a recibirlos” explicó en Radio Provincia Vergara.
Frente a esta situación, el gremialista explicó que permanecieron fuera y cuando llegaron todos los trabajadores del turno ingresaron a cumplir su horario de trabajo por un lateral del predio.
“Nos quedamos en el predio y no nos asignaron tareas y cuando llego el turno tarde a las 14 resolvimos en asamblea hacer una permanencia en la fábrica por el temor de irnos y encontrar la fabrica vacía al día siguiente como pasó con las trabajadoras textiles que se fueron y al regresar se habían llevado las máquinas” explicó.
Consultado sobre si había indicios de que se llegara a esta instancia por parte de la empresa, el referente de los trabajadores contó que “hace unos dos meses la empresa había presentado una preventivo de crisis en la Subsecretaria de trabajo de Neuquén y habíamos tenido reuniones con los empresarios y nos explicaban la crisis que ellos veían, pero nosotros con los trabajadores y el sindicato rechazábamos esto porque en la empresa estábamos produciendo.”
En ese momento según contó Vergara, los empresarios habían ofrecido una indemnización al 70% y muchos de los trabajadores aceptaron, “pero al ver la forma y la modalidad del acuerdo que planteaba que ese 70% iba a ser pagado en varias cuotas y que cada cuota iba a ser un sueldo o sea que estarían algunos dos años para cobrar todo y la mayoría se bajó del acuerdo. Otros querían arreglar e irse pero la empresa tampoco podía pagarlo porque decían que necesitaban un crédito para poder pagar las indemnizaciones.”
EN ese marco, Vergara contó que hace un tiempo en la maderera cortaron la luz por falta de pago. “Nosotros veníamos a trabajar igual y cumplíamos horario; además con luz natural hacíamos tarea con moto sierras o lo que se podía hacer del trabajo.”
“Ese era el clima que se vivía –explicó el secretario gremial- pero estábamos en un principio de acuerdo, tratando de encontrar soluciones y el lunes nos encontramos con que no nos dejaron entrar y después del medio día llegaron algunos telegramas al lugar.”
“Recomendados por nuestro sindicato rechazamos el telegrama que envió la empresa porque los mismos aluden al preventivo de crisis que la secretaría de trabajo no ha validado aun por ende no pueden ampararse en el preventivo de crisis para despedir a nadie.”
“Los trabajadores y el sindicato no aceptamos el preventivo porque la empresa estaba trabajando y el material estaba saliendo. Tenemos el stock natural que siempre hubo en la empresa por eso negamos cualquier tipo de crisis en la que la empresa se ampare, lo que está pasando es que los dueños nuevos no están ganando lo que esperaban ganar” agregó.
En este sentido explicó que “hace 7 meses a la maderera la compró un grupo que se dedica a servicios petroleros y cuando agarraron la empresa dijeron que venían con inversiones y no se invirtió nada. Creemos que a nosotros que es un método que están usando la mayoría de los empresarios porque en el Parque Industrial están haciendo mucho esto de vaciar empresas. Lo ha realizado con la Textil, lo hicieron en Cerámica Neuquén y si siguen así esto va a ser un parque industrial fantasma.”
“Nosotros podemos entender una crisis en dónde los impuesto subieron y cosas así, eso lo entendemos es pero acá lo que hay es empresas que no están ganando lo que esperaba ganar, pero ganancias tienen. Lo que pasa es que como no obtienen las ganancias que esperaban perdemos nosotros siendo la variable de ajuste” agregó.
“Hay compañeros que tienen 40 años en la empresa y esperaban jubilarse y el lunes se encontraron con un portón cerrado. Un compañero con 40 años trabajando el dijo al dueño vos viniste compraste esta fábrica y viniste a arruinarme la vida. El empresario vino no obtiene lo que quiere y lo pagamos los trabajadores siempre somos nosotros la variable de ajuste” afirmó.
Entre las cosas que se le cuestionan al nuevo grupo propietario es que “dejó hace un año y medio de pagar los aportes jubilatorios y a la obra social y en el recibo que nos entregan los descuentos están realizados.”
Los dueños han planteado que necesitan un crédito de nación y uno de provincia para indemnizar a los trabajadores “porque en caso de que acepten los trabajadores la indemnización no tiene el dinero” explicó.
Consultado sobre el respaldo de legisladores de diferentes bloques afirmó que “se solidarizaron con nosotros y le plantearon al propietario que es con los trabajadores adentro que se avanza, no con los trabajadores despedidos y que si hay un crédito sea para seguir trabajando no para indemnizarnos. También los bloques rechazan el preventivo que pretende la empresa y que permitiría una indemnización del 50%”
“Nuestra mejor indemnización es nuestro trabajo. Tenemos miedo de que si nos vamos vacíen la empresa” concluyó.
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