El abogado constitucionalista Eduardo Barcesat sostuvo que el Consejo de la Magistratura nacional inició un proceso de “persecución ideológica” contra el juez federal de La Plata Carlos Rozanski.
El magistrado platense no solamente fue el primer funcionario judicial en establecer como genocidio los crímenes cometidos durante la última dictadura cívico militar, sino también tuvo actuación en la causa vinculada a la apropiación ilegal de Papel Prensa, por parte del Grupo Clarín y el diario La Nación.
Según Barcesat, “ciertos poderes económicos, encabezados por (Héctor) Magnetto, no le perdonan al juez haberse metido con los poderes fácticos de la Argentina”.
Rozanski deberá presentarse este jueves ante el Consejo de la Magistratura para declarar ante el tribunal de disciplina, que reabrió una causa contra el juez por acoso laboral cuando la misma ya había caducado.
Según Bacesat, el artífice de la denuncia contra Rozansky fue el sindicalista Julio Piumato, aliado de Hugo Moyano. “La brutalidad de este procedimiento radica en que se re circularon dos denuncias realizadas por Piumato sin que hubieran nuevas pruebas. Esas mismas causas las re circulan. Es una persecución ideológica visible, es absolutamente certero que hay una persecución ya que nadie comete quiebres constitucionales –como el Consejo de la Magistratura- para llevar adelante una acusación así”, indicó Barcesat, quien agregó: “Piumato es un instrumento de poder, está en el sector más amarillo del poder, es un instrumento dócil de esa estructura, y el ha tenido graves problemas de acoso laboral y sexual donde varios de los integrantes de su lista se apartaron para no quedar pegados a su conducta”.
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