“La Argentina tiene que construir centrales a carbón, que es energía barata constante y segura” afirmó el Director del Observatorio de la Energía, Tecnología e Infraestructura para el Desarrollo (OETEC) en Radio Provincia.
La nueva matriz neoliberal en la Argentina posee un capítulo particular en la generación energética y el desarrollo regional de la provincia. El rechazo constante a la realización de las represas hidroeléctricas sobre el río Santa Cruz bajo la excusa de los problemas ambientales o el freno total de la usina térmica en Río Turbio, forman parte de esa misma matriz neoliberal de la Alianza Cambiemos.
#LaSemana dialogó con el director del Observatorio de la Energía, Tecnología e Infraestructura para el Desarrollo (OETEC), Federico Bernal, sobre el actual escenario energético.
“Hay una convergencia entre el neoliberalismo energético y los postulados del fundamentalismo ambiental que dice que el único proceso de diversificación de la matriz energética se tiene que hacer en base a energía solar o eólica. Esto es así porque esta matriz neoliberal exige convertir a la energía en un bien escaso y necesita una reducción de la demanda. ¿Por qué tiene que caer la demanda? Porque las energía renovables son intermitentes”, explicó Bernal.
La Alianza Cambiemos destinó más de 1500 millones de pesos en subsidios a la generación de energías renovables en 2016, en detrimento de otras fuentes de generación. “Se dejan de producir combustibles fósiles, que es energía barata, confiable y nos permite un suministro que no dependa de tecnologías foráneas. Entonces, dejar estos combustibles para pasar a energía renovables es una forma de encarecer este bien necesario. Esto claramente contribuye a los intereses del Grupo Shell. Si cae la demanda –por un menor poder adquisitivo de la sociedad y menor consumo de la industria- por lo tanto, todo excedente que se genere será destinado a la exportación”, agregó el director de OETEC.
El año pasado, el subsecretario de desarrollo minero, Mario Capello, sostuvo que se estaban estudiando alternativas para Río Turbio y su usina térmica a base de carbón. Esas “alternativas” tenían que ver con la generación de energías renovables como posible reemplazo de la usina térmica. Uno de los impulsores de ese “cambio” fue el diputado de la Alianza Cambiemos, Eduardo Costa, según las palabras de Capello.
“Lo que tiene que hacer la Argentina es construir centrales a carbón, que es energía barata constante y segura. Además es desarrollo regional, de la Patagonia, que mejorará la calidad de vida de miles de familias. Sería una Patagonia con energía generada en la Patagonia y con excedentes para el resto del país. Sin energía abundante y barata no hay desarrollo posible. Desde el observatorio rechazamos el fundamentalismo ambiental, que en nombre del dióxido de carbono, de los osos polares, del maca tobiano, tiran abajo desarrollos necesarios para el buen vivir de la población”, concluyó Bernal.
