Ramiro Menna: “Siguen brotando las flores en este desierto”

Ramiro Menna: “Siguen brotando las flores en este desierto”

Ramiro Menna es hermano de Maxi, el nieto recuperado 121. En una extensa entrevista durante el programa La Semana, habló del encuentro con su hermano, concretado luego de 40 años.
“Tenemos esa sensación de paz, que este hijo de Ani, de mamá, que no sabíamos si había nacido o no, lo encontramos bien. Tiene su familia, me parece que Maxi es un tipazo, lo que pude conocer en las primeras horas luego de enterarme de la identidad de mi hermano, es que tiene una familia muy linda, su mujer la descubrí como muy transparente, con mucha alegría, a pesar de toda la conmoción inicial”, sostuvo Ramiro.
Ramiro y Maxi son hijos de Ana María Lanzillotto y Domingo “el Gringo” Menna (PRT-ERP), asesinados durante la última dictadura cívico militar. Durante el reportaje, Ramiro valoró la importancia política y cultural de la militancia por los derechos humanos y advirtió sobre las señales del Gobierno nacional para retroceder en la búsqueda por “verdad, memoria y justicia”.
“Que los juicios se lleven adelante es parte de la batalla cultural, el fin de la cárcel no debería ser punitivo en sentido de castigo. La condena tiene que ser en un sentido social. Las cosas que se hicieron (durante la dictadura cívico militar) son repudiables, no hay forma de darle un metro para la comprensión. Hubo militantes populares organizados con actividades de las más diversas. El PRT tenía un frente cultural, estudiantil y un periódico. También una fuerte militancia sindical. De alguna manera, los juicios sirven para desnudar esa realidad, van poniendo luz a todo lo que la dictadura quiso destruir”, agregó.
Ramiro habló de su hermano como “el nieto de todos” ya que la historia de lucha de las Abuelas de Plaza de Mayo (como la de las Madres) no se circunscribe a hechos puntuales sino que atañen al conjunto de la sociedad.
“Esto es una victoria. Lo veo en mismos hijos que aprenden de nosotros y espero que se enamoren de la militancia. Y lo veo a Maxi y sus hijos y también espero que se enamoren de sus abuelos y es ahí que siento que no nos ganaron, que no pudieron, que siguen brotando las flores en este desierto que quisieron crear”, concluyó.

 

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